La cantante colombiana ha asistido al desfile de Viktor & Rolf en la Semana de la Alta Costura de París.
Este miércoles ha sido una de las indiscutibles protagonistas de la Semana de la Alta Costura de París. Tras regresar de la escapada estival a Costa Rica, Shakira quién disfrutó junto a su hermano Tonino y sus dos hijos, Milan, de 11 años, y Sasha, de 9, y aterrizar en suelo catalán hace tan solo unas horas para dejar a los pequeños con su padre, Gerard Piqué, la artista de Barranquilla ha puesto rumbo a la ciudad del amor.
Arropada de nuevo por su inseparable hermano, confidente y mánager y enfundada en un estilismo a la altura de la ocasión con mensaje incluido, ha asistido al desfile de Viktor & Rolf para vibrar desde el ‘front row’ con su innovadora propuesta de cara a la temporada Otoño/Invierno 2023/2024.
Después de su visita relámpago a Barcelona, la vocalista colombiana, de 46 años, ha hecho un pequeño parón en la promoción en la que está inmersa a raíz del lanzamiento de su nuevo éxito musical Copa vacía junto a Manuel Turizo para asistir a esta cita con la moda parisina.
Su llegada al evento ha estado marcada por la expectación y la multitud de flashes que se han centrado en ella, en su espectacular look y en lo mucho que ha transmitido a través de él. Para el acto, en el que las temperaturas han rondado los 22 grados con un cielo nublado, la intérprete de temas como Waka Waka o Chantaje se ha enfundado en un exclusivo diseño de Viktor & Rolf enmarcado en su colección de Otoño de 2018. Se trata de una pieza extravagante, muy alejada al estilo que acostumbra a lucir y cuya inspiración se remonta a una apuesta que la firma lanzó una década antes.
Con un llamativo y contundente ‘NO’ de grandes dimensiones en la zona del pecho y la solapa que cubre prácticamente la totalidad del tronco superior de la cantante, la gabardina blanca con lazada a la cintura y detalles metalizados con rúbrica de la casa de moda con sede en Ámsterdam dice mucho. Y lo hace en la misma línea que la expareja de Gerard Piqué sigue de un tiempo a esta parte en su faceta musical.
El significado de esta elaboración creativa es, tal y como expresaron en su día los propios diseñadores, «un no complejo»: «Como artista, la creatividad es tu única arma, y tratar de traducir los sentimientos negativos en algo bonito o positivo es nuestra forma de lidiar con lo que experimentamos y tratar de convertirlo en una experiencia positiva».
Precisamente aquella filosofía de la que hablaron Viktor & Rolf en 2008 es la que vibra en la misma frecuencia que Shakira desde que decidiera volcar sus sentimientos e insatisfacciones relativas al final de su historia de amor con el exfutbolista. «El ‘sí’ está sobrevalorado», ha reflexionado en su perfil social. Empoderamiento, metamorfosis, capacidad de superación y de transformar las vivencias menos agradables en arte y disfrute para su entregado y fiel público es lo que decidió hacer la incontestable estrella mundial a raíz de Te felicito, hace ya un año, canción a la que siguió Monotonía, Bzrp Music Sessions, Vol. 53, TQG y Acróstico.
La cantante, que ha disfrutado del desfile junto a otras personalidades y compañeras de profesión como Camila Cabello y se ha detenido para posar radiante ante las cámaras, ha combinado su elección con unas sandalias doradas de plataforma y tacón fino, bolso de mano a tono y unas lentes de estilo retro y escasa opacidad. Precisamente gracias a que su mirada podía intuirse a la perfección y a la maravillosa sonrisa que ha dibujado en su rostro durante todo el evento, ha vuelto a evidenciar a través del lenguaje no verbal el dulce momento que atraviesa, tanto a nivel profesional como en el ámbito íntimo.
