En protesta por la entrada en vigor de la Ley SB 1718, más conocida como la “Ley DeSantis” que criminaliza a los migrantes, el canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina, aseguró que no volverá a visitar Florida, ni a transitar por ese estado de Estados Unidos.
Esta norma, que entró en vigencia el 1 de julio, establece que quien transporte a una persona indocumentada podría ser condenado a cinco años de prisión o pagar una multa de 5,000 dólares por cada indocumentado que lleve.
Asimismo, obliga a las empresas con al menos 25 empleados a verificar el estado migratorio de cada uno de ellos en la base de datos federal denominada E-Verify, y quienes incumplan serán sancionados.
También establece que cuando una persona con estatus de indocumentado en Estados Unidos llegue en busca de atención médica a los hospitales, obligatoriamente se le tendrá que preguntar su estatus legal en el país y reportarlo a la Policía.
El canciller Reina, adelantó que realizará una propuesta formal ante la presidenta Xiomara Castro para ordene a todos los miembros de su administración adoptar la misma política en protesta por la Ley ya que la considera “racista y xenofóbica”