El equipo de Honduras llega a su tercer compromiso, en el estadio Bank of América de Charlotte, Carolina del Norte (EE.UU.), con tres bajas importantes: en defensa no contará con Luis Vega, que salió lesionado al minuto 24 en el partido del jueves 29 de julio contra Qatar, mientras que en el ataque ese mismo día perdió por una fractura en el antebrazo izquierdo a Alberth Elis, al anotar el gol del empate (1-1), y a Rubilio Castillo, expulsado después del juego.
Elis, del Girondis de Burdeos (Francia), sufrió una «fractura oblicua del radio izquierdo a nivel de su tercio distal», según un informe médico preliminar, y estaría retirado de las canchas de cuatro a ocho semanas.
Sobre las ausencias de Vega, Elis y Castillo, el entrenador de Honduras, Diego Vázquez, dijo en la víspera que «son bajas importantes», pero que buscará «tomar buenas decisiones y tratar de poner a los que estén mejor».
En la delantera de Honduras el que más colmillo ha mostrado es la «Panterita» Alberth Elis, mientras que Jerry Bengtson y Jorge Benguché, que son goleadores en el Olimpia, de Tegucigalpa, no han rendido lo que Vázquez esperaba de ellos.
Los catrachos han venido de menos a más, con un primer juego contra México para el olvido y una mejoría ante Qatar, rival contra el que controlaron el partido, pero les faltó contundencia al momento de definir en el área rival.
A Honduras y Haití solo les sirve ganar, con lo que también sueña Qatar, que no la tendrá fácil contra México, que ha dominado el Grupo B con dos triunfos, ante Honduras por 4-0, y contra los haitianos por 3-1.
La selección haitiana llega al duelo contra Honduras con la ventaja del triunfo de 2-1 que logró ante Qatar en el primer juego de la competición.
Al equipo caribeño, que ha mostrado un fútbol rápido, incluso un empate ante Honduras le podría ser suficiente para poner pie en los cuartos de final.
Honduras pasaría a los cuartos de final si venciera a Haití y que Qatar perdiera o empatara contra México.