Francia ha vuelto a blindar sus principales ciudades este sábado ante el temor de que vuelvan a repetirse violentos disturbios como los ocurridos en noches pasadas en protesta por la muerte de Nahel M., de 17 años, que murió el pasado martes por disparos de un agente de la Policía en Nanterre.
Precisamente, este sábado se ha celebrado el funeral del joven, donde una multitud de personas han querido mostrar sus respetos y dar el último adiós. Sus restos mortales descansan ya en la sección musulmana del cementerio de Mont-Valérien.
Mientras tanto, ciudades como Marsella, Estrasburgo o Lyon han cancelado manifestaciones y otros eventos, han restringido el transporte público y han hecho un llamamiento al cierre de comercios después de que la madrugada del viernes al sábado hubiesen sido detenidas 1.311 personas en todo el país y 79 policías hayan resultado heridos.
PARÍS SE BLINDA ANTE EL TEMOR A NUEVOS DISTURBIOS. En los Campos Elíseos de París, las tiendas permanecen cerradas, tapiadas y bajo vigilancia policial ante los posibles disturbios que pudieran darse esta noche en la zona, ya que ha habido convocatorias online para acudir esta noche hasta ese punto de la capital francesa. Al menos 31 personas han sido detenidas a primera hora de la noche de este sábado tanto en París como en otros puntos del país, informa Le Parisien.