Siete personas fallecieron en el incendio en una casa del centro de La Habana, luego de una explosión de ciclomotores eléctricos que estaban dentro, informó el gobierno de la capital cubana.
El incidente se produjo en una “vivienda de construcción mixta de mampostería y madera en su interior” ubicada en el popular barrio de Centro Habana “y todo parece indicar que el siniestro comenzó por la explosión de los vehículos que se encontraban en la entrada de la sala”, indicaba un comunicado gubernamental publicado en Facebook.
No se especificó en la nota oficial la cantidad de motos o bicis eléctricas involucradas.
Ese tipo de vehículos comenzaron a inundar las calles de las principales localidades de Cuba en los últimos años como una solución a dos acuciantes problemas: el de la falta de combustible y las limitaciones en el transporte público de pasajeros.
Entre los siete fallecidos, había dos menores de edad quienes no pudieron ser salvados pese a la intervención de los bomberos. La información publicada en la red social tenía fotografías de los rescatistas y algunos de los escombros a los que quedó reducida la casa.
Motocicletas, bicis, triciclos de carga, todos eléctricos –adquiridos en Panamá o de una fábrica local con tecnología china– compiten en las calles de Cuba con los viejos autos clásicos y los Ladas rusos. Se hicieron realmente populares desde la pandemia, ante las necesidades de transporte en la isla.
En julio del 2022, las autoridades informaron que, desde que se autorizó su importación a finales de la década pasada hasta ese momento, se habían reportado unas 300 mil motos eléctricas. Se estima que el parque vehicular es de unos 500 mil automóviles.
Según las últimas cifras disponibles de Cuerpo de Bomberos en el primer semestre de 2020 se produjeron 263 incendios de baterías de gel o litio que utilizan estos ciclomotores, frente a los 208 del año 2019.
Los expertos advirtieron que son aparatos seguros si se les da el mantenimiento adecuado, pero hay quienes las “personalizan” para que corran más o para lograr más carga, además es posible observarlas estacionadas en las entradas o salas de las viviendas para evitar los robos.