El régimen chavista de Venezuela condenó este sábado la “amenaza irracional” del grupo Wagner, que lanzó una rebelión armada contra el Ministerio de Defensa de Rusia, y reiteró su “absoluto respaldo” al presidente Vladimir Putin.
El presidente Nicolás Maduro, en nombre del Ejecutivo venezolano, “condena enérgicamente la amenaza irracional del grupo Wagner y de su dirigente Yevgueni Prigozhin, de promover una insurrección armada en la Federación de Rusia, a través de métodos terroristas”, dice un comunicado de la Cancillería del país caribeño.
La llamada revolución bolivariana, socia comercial y aliada ideológica de Rusia, rechazó “cualquier cambio de poder o sublevación armada por vía violenta e inconstitucional, así como el uso de fuerzas externas que apuestan a una guerra civil”.
Esto, argumentó Venezuela, atenta “contra la soberanía y autodeterminación de los pueblos” y vulnera “la estabilidad política y la paz social de Rusia”.
Por ello, la nación sudamericana “expresa su absoluto respaldo al presidente Putin y expresa su solidaridad con el pueblo ruso ante este ataque contra la paz, estabilidad y la sólida democracia de este hermano país”, concluyó el escrito.
El jefe del grupo de mercenarios rusos Wagner, Yevgueni Prigozhin, anunció este sábado que sus combatientes regresarán a sus bases tras acercarse a 200 kilómetros de Moscú, para evitar un derramamiento de sangre.
Las fuerzas de Wagner cruzaron la frontera rusa en la madrugada y tomaron la ciudad rusa de Rostov en el Don, tras lo cual columnas de esta formación partieron en dirección a Moscú para “ocuparse” de aquellos que “aniquilan” a los soldados rusos.
El presidente ruso calificó de traición la sublevación de Wagner y afirmó que los responsables pagarán por ello.