El capitán en condición de retiro, Santos Orellana, se encuentra muy satisfecho luego de ser absuelto del delito de lavado de activos. «Agradecido con Dios, hoy ha sido una victoria para mí, para mi familia. Siempre me someto a la justicia, estamos libres y me siento tranquilo, no creo que tenga enemigos», dijo.
Orellana comentó que, no planea demandar al estado por el momento, pero lo analizará. «Demandar al estado sería demandar a la pobreza del país, vamos a analizarlo a futuro».
«Como hondureño tengo el derecho de aspirar a dirigir el país. Dios nos ha preparado para eso. Si es de Dios habrá circunstancias para seguir adelante».
«Me acusaron de lavado de activos y si es así fue a las Fuerzas Armadas, hay que aprender a perdonar», finalizó Orellana.