El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) adquirió dos vehículos eléctricos, como una forma de mitigación y adaptación del cambio climático y amigables con el medio ambiente.
Las unidades móviles funcionan con centros de carga eléctrica y pueden recorrer hasta 120 kilómetros en una ciudad. Este tipo de automóviles no producen ningún sonido y la forma de conducirlos es muy sencilla.
Pese a su diminuto tamaño, este vehículo puede utilizarse para el traslado de mercaderías. Otra de las grandes ventajas es que no ocupan combustible, algo que traería ahorro en su bolsillo y la no contaminación del medio ambiente.