West Ham venció a Fiorentina por 2-1 en el Eden Arena de Praga y se consagró campeón de la UEFA Europa Conference League. Mohamed Benrahma abrió el marcador de penal para el conjunto inglés, Giocomo Bonaventura selló el empate transitorio con asistencia de Nicolás González y Jarrod Bowen, sobre el final, anotó el gol del título.
Ambos equipos se estudiaron en la primera parte. La Viola mostró un planteo más ofensivo y se posicionó en campo rival, mientras que los Hammers se replegaron y buscaron lastimar a través de un contragolpe. Sin embargo, no hubo ocasiones concretas para convertir hasta el tiempo adicionado, cuando Luka Jovic capturó un rebote dentro del área y, de cabeza, empujó la pelota al fondo de la red. No obstante, el juez invalidó el tanto por fuera de juego, luego de la revisión en el VAR.
En la segunda mitad, los clubes asumieron más riesgos y sus propuestas se trasladaron al resultado. A los 16 minutos, el árbitro percibió una mano de Cristiano Biraghi dentro de su propio área y sancionó penal a favor del equipo inglés, que Benrahma cambió por gol. Instantes más tarde, Nicolás González controló un pelotazo y asistió a Giacomo Bonaventura, quien controló y rápidamente remató cruzado para sentenciar la igualdad.
Si bien Fiorentina fue el que más cerca estuvo de la victoria con alguna chance aislada, West Ham terminó quedándose con la Conference League gracias al tanto de Bowen, quien recibió un gran pase filtrado de Lucas Paquetá, se enfrentó mano a mano con Pietro Terracciano y sentenció el 2-1 definitivo.
De esta manera, el conjunto londinense, que tuvo al argentino Manuel Lanzini en el banco de suplentes, obtuvo su primer trofeo internacional en 58 años. El último había sido la Recopa de Europa 1964-65.