La empresa de transporte «Catisa» reanudó sus operaciones este día, tras negociar el pago del «Impuesto de guerra» con grupos criminales que mantienen de rodillas a los hondureños.
Los conductores de buses de esta empresa madrugaron este día para presentarse a la terminal y recoger a los pasajeros, aunque se puede presenciar poca presencia de usuarios debido al temor de ser víctimas de la violencia.
Cabe recordar que, el pasado lunes 15 de mayo un ayudante de un bus rapidito de esta empresa recibió un balazo en su rostro, después se debatía entre la vida y la muerte en el hospital Mario Catarino Rivas de la ciudad industrial del país, pero se reportó su fallecimiento el pasado 16 de mayo.
Han sido cuatro veces que la empresa Catisa paraliza sus unidades en este año debido a la delincuencia, ya que diferentes estructuras criminales están cobrando grandes cantidades de dinero de extorsión para dejarlos trabajar.