Decenas de latinos salieron este día a las calles de Florida, Estados Unidos para exigirle al gobernador Ron DeSantis que no firme las últimas reformas migratorias aprobadas.
Por 83 votos a favor y 36 en contra (todos demócratas y un republicano), la Cámara de Representantes de Florida aprobó este martes un duro paquete de ley migratoria contra la inmigración indocumentada (H.R. 1617), convirtiéndose en el estado con la ley más dura en su tipo en Estados Unidos.
La nueva legislación, respaldada por el gobernador Ron DeSantis, incluye cambios al programa E-Verify, que verifica el estado migratorio de los trabajadores, añade fondos para un programa de transporte de inmigrantes indocumentados y aumenta las sanciones por tráfico de personas sin autorización de permanencia en el país.