Varios hondureños se salvaron de morir en la masacre en Cleveland, Texas luego que un mexicano armado disparó contra cinco personas de nacionalidad hondureña.
Los fallecidos eran familiares y se encontraban reunidos en una casa en el momento del ataque. Varios hondureños sobrevivieron porque se escondieron en diferentes puntos repeliendo las balas. Dos menores de edad se salvaron porque el asesino no llegó hasta la habitación donde se encontraban.
«Lo único que pedimos es la ayuda para repatriar a nuestros familiares, entre ellos están mis primos Sonia Guzmán y el niño es Daniel Lazo Guzmán de 9 años», dijo Karen Velásquez, quien es prima de una víctima.
«Sonia tenía 8 años viviendo en EEUU y Daniel llevaba cinco años allá. Ellos eran originarios de La Misión Taulabé, ahí vive su mamá».
