Los árbitros del segundo partido del playoff de cuartos de final de la Euroliga entre el Real Madrid y el Partizán de Belgrado han decidido suspender el partido después de una brutal y multitudinaria pelea cuando quedaban algo menos de dos minutos de un choque que ya estaba sentenciado, con victoria por 80-95 de los serbios.
Todo comenzó con una dura falta de Sergio Llull a Panter, a la que el base estadounidense respondió encarándose y con el puño en alto. Fue entonces cuando Yabusele entró en escena, agredió al norteamericano y comenzó la tremenda trifulca.
Todo sucedió a falta de 1.40 para el final, con el partido ya decidido (80-95). En la trifulca se vieron involucrados también los dos banquillos y se saldó, después de varios combates de artes marciales por parejas y grupos, y después de más de diez minutos de deliberación arbitral, con un cónclave entre colegiados y entrenadores que decidió el árbitro principal, Radovic, dando por finalizado el partido.
Una decisión sin precedentes en la que la Euroliga tendrá que tomar medidas. Se avecinan duras sanciones para varios jugadores del Real Madrid.