Mientras el pueblo sigue clamando por un eficiente sistema de salud, los colectivos del partido Libertad y Refundación (Libre) se toman una vez más las instalaciones del centro de salud Alonso Suazo en exigencia de varias peticiones.
Según los manifestantes, ellos estuvieron 12 años en las calles en resistencia por lo que merecen que sean tomados en cuenta y además le piden a la directora regional de salud, Sonia Amaya, que cumpla con la promesa de conceder 80 oportunidades laborales.
Además, los protestantes solicitan la contratación de gente competente y la no contratación de personal a militantes del Partido Nacional, a los que ellos llaman “Mapaches”.
Por otra parte, muchos ciudadanos con padecimientos y enfermedades graves pagaron grandes cantidades de dinero y se levantaron en horas de la madrugada con el fin de recibir atención médica en este centro de asistencia, pero los manifestantes impiden los accesos colocando una bandera de Libre y un candado.