En La Ceiba se vivió un domingo lleno de regocijo. Los ceibeños celebraron la resurrección de Cristo con una populosa misa en la parroquia de San Isidro. Mientras el padre daba la bendición a los fieles, algunas de las personas elevaban sus plegarias al cielo solicitando paz para el país y bendiciones para sus familias.
«Resurrección es volver a nacer como seres humanos», indicó un devoto católico quien agregó que, «a veces nos preocupamos por tramitar la visa para EEUU, pero no tramitamos la visa para ir al cielo».
Linda Núñez, una de las feligreses, mencionó que, «estamos viviendo un Cristo vivo y así debemos sentirnos los hondureños. Es el momento de estar con mucha esperanza y fe».