La Policía Nacional ha enviado en las últimas horas refuerzos operacionales a varios centros penitenciarios del país, para velar por la vida de los privados de libertad ahí recluidos por algunos conatos de amotinamiento.
Según las primeras investigaciones, miembros de la Pandilla 18 y de la Mara Salvatrucha MS-13, estarían agrediendose entre si.
Una de las organizaciones criminarles habría recibido instrucciones de un grupo de personas desde fuera de las cárceles para tratar de desestabilizar la seguridad nacional durante los últimos días de la Semana Santa.
Si bien la Policía Nacional ha destinado una considerable cantidad de funcionarios para las labores de resguardo de veraneantes, todavía se cuenta con las Direcciones de Fuerzas Especiales, DIPAMPCO, Policía de Fronteras y la Policía de Inteligencia que serán utilizados para la intervención de estos centros penales afectados.
Actualmente las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario realizan coordinaciones con la Policía Nacional para restablecer el orden en los centros penitenciarios de Támara, Siria, en Moroceli y en Ilama en Santa Bárbara; varias Unidades Especiales de la Policía Nacional ya estan en estos lugares para reforzar las operaciones.
Por otro lado, no se desestima que las mismas personas que han orquestado actividades delictivas en el pasado para perjudicar la imagen del actual gobierno esten tras la planeación de estás acciones de amotinamiento en algunos centros de reclusión en el país.
