El rey Carlos III de Inglaterra se convirtió el jueves en el primer monarca en dar un discurso ante el Parlamento alemán, el Bundestag, dentro de una visita de alto perfil para reforzar los lazos entre las dos potencias europeas.
Hablando ante legisladores y otros dignatarios en una cámara baja abarrotada, el monarca británico enfatizó los estrechos vínculos entre el Reino Unido y Alemania que se remontan a siglos atrás, incluidos los vínculos de su familia con la Casa Real de Hannover, y el actual desarrollo económico, científico, cultural y económico y la cooperación militar entre los dos países.
Carlos señaló que Londres y Berlín han brindado ayuda considerable a Ucrania en sus esfuerzos por defenderse de la invasión de Rusia.
“La decisión de Alemania de brindar tanto apoyo militar a Ucrania es extremadamente valiente, importante y bienvenida”, acotó.
Hablando mayormente en alemán fluido, notó cómo la historia entrelazada de las dos naciones se podía ver en la sede misma del Bundestag. Muy dañado durante la guerra, la restauración del edificio del Reichstag en la década de 1990 se coronó con una cúpula de vidrio diseñada por el arquitecto británico Norman Foster con la intención de ser un símbolo de transparencia y rendición de cuentas.
“Desde aquí, los ciudadanos pueden ver trabajar a sus políticos”, dijo Carlos. “Democracia en acción”.
El monarca de 74 años también transitó por territorio seguro, haciendo bromas suaves sobre la rivalidad en el fútbol, el humor nacional y la admiración mutua por sus culturas, desde los Beatles hasta Kraftwerk y Brahms hasta Byron. Se refirió brevemente a la sombría historia del nazismo y la Segunda Guerra Mundial.
Carlos y Camila, la reina consorte, visitarán Hamburgo el viernes y acudirán al memorial del Kindertransporte, o transportes de niños, que recuerda a los más de 10.000 niños judíos rescatados de la Alemania nazi hace 85 años. También conmemorarán a los muertos en el bombardeo aliado de Hamburgo en 1943.
“Prestar atención a las lecciones del pasado es nuestra responsabilidad sagrada, pero solo se puede cumplir por completo a través de un compromiso con nuestro futuro compartido”, dijo. “Juntos debemos estar atentos a las amenazas a nuestros valores y libertades, y firmes en nuestra determinación de hacerles frente. Juntos debemos esforzarnos por la seguridad, la prosperidad y el bienestar que merece nuestro pueblo”, agregó.
Es el primer viaje de Carlos al extranjero como monarca. Él y Camila llegaron a Berlín el miércoles. Multitudes de simpatizantes y el presidente Frank-Walter Steinmeier, recibieron a la pareja en la emblemática Puerta de Brandeburgo de la capital. Más tarde asistieron a un banquete en su honor en el palacio presidencial.