Un terremoto de magnitud 6,5 golpeó cerca de la ciudad sureña de Baláo, Ecuador, informó el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) el sábado por la tarde.
El número de personas muertas se elevó a por lo menos 16, informó el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, en una conferencia de prensa en Cuenca, provincia de Azuay.
La Secretaría General de Comunicación de la Presidencia de Ecuador tuiteó en su cuenta oficial que 381 personas resultaron heridas por el sismo.
Los aeropuertos de Guayaquil y Cuenca permanecen abiertos y operativos, según las autoridades.
El sismo estuvo localizado una profundidad de 65,7 km, indicó el USGS, que denominó al temblor como uno estado de «Alerta Amarilla» con el potencial «de muertes y pérdidas económicas relacionadas con el temblor».
Previamente, el USGS advirtió que «algunas víctimas y daños son posibles», pero dijo que «el impacto debería ser relativamente localizado».
No hubo alerta de tsunami vigente para el área, según el Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU.