Unas 28 ciudades del estado de Rio Grande do Norte, en el noreste de Brasil, registraron desde la madrugada del martes una serie de ataques orquestados por un grupo criminal, con incendios y disparos contra oficinas públicas, comercios y vehículos, informaron las autoridades.
El gobierno del estado trabaja con la hipótesis de que los disturbios fueron planeados desde el interior de las prisiones, como protesta por las condiciones de vida y el endurecimiento de las medidas de control en esas instituciones, indica la agencia AFP.
Los ataques comenzaron la madrugada del martes en unas 19 ciudades, incluida la capital, Natal, y, pese al fortalecimiento de la seguridad, se expandieron desde este miércoles a un total de 28, según fuentes policiales citadas por el sitio de noticias G1.
Imágenes difundidas por redes sociales y medios locales mostraron autobuses, camiones y otros automóviles en llamas, y patrullas policiales con orificios de balas.
“El Estado está firme, trabajando para devolver la normalidad al pueblo de Rio Grande do Norte”, dijo este miércoles la gobernadora Fátima Bezerra ante periodistas.