Luego de intensas protestas, dimes y diretes entre maestros y el secretario de Educación y tras haber colocado la bandera de Honduras en el portón principal, los manifestantes decidieron abandonar su lucha y hoy amanece libre el acceso de la Departamental de Educación de Francisco Morazán.
«No nos han pagado y nos declaramos en calamidad doméstica», ese era el clamor de cientos de maestros que mantenían como medida de presión la toma de este ente educativo.
Además de reclamar su pago de salario, los maestros interinos reclamaban sus derechos laborales y pedían que se les incluyera en una planilla.
Los quejosos solicitaban la presencia de las altas autoridades de Educación y que dieran respuesta positiva a sus peticiones, luego de negociaciones los maestros obtuvieron sus peticiones cumplidas.
