Doña Guadalupe Maldonado es una anciana que vive en una casa de la colonia Stibys de la ciudad de San Pedro Sula, Cortés, desde hace 23 años, a pesar de su edad, personas allegadas la han llevado hasta los juzgados sampedranos.
Las dos hijas de su fallecido esposo la han amenazado, intimidado y la llevaron a audiencia todo con el fin que desaloje la vivienda donde ella reside.
Según la anciana, ella compró la casa y «le costó» mucho esfuerzo para adquirirla y ahora le pide a las autoridades que intervengan a su favor, pero las dos hijastras argumentan que la casa era de su padre y desean recuperarla.
«Primero Dios y luego mis amigos, yo lo que pido es que no me quiten mi casita porque yo vivo sola», sollozó doña Guadalupe.