Las estrellas de Disney reconocieron que crecieron en un entorno de inestabilidad y que perdieron gran parte del dinero que ganaron durante su período de estrellato.
Cole Sprouse (30) formó parte recientemente del podcast «Call Her Daddy» el pasado miércoles, instancia en la que se sinceró con el presentador Alex Cooper acerca de la cruda infancia que debió vivir junto a su gemelo detrás de cámara.
Las estrellas de Zack y Cody: Gemelos en acción vivieron el divorcio de sus padres cuando apenan tenían un año, época en la que ya eran completamente famosos. «Nuestra madre nos puso a mi hermano y a mí a actuar cuando teníamos 8 meses porque necesitábamos dinero», reveló en una entrevista anterior.
A medida que los ex chicos Disney crecieron se transformaron rápidamente en el sustento de su hogar, cuyas ganancias fueron administradas irresponsablemente por su madre, Melanie Wright, hasta los 10 años. «Cuando mi padre recibió la custodia forzosa, prácticamente habíamos perdido toda la primera parte de nuestra carrera», confesó culpando a su madre.
Matthew Sprouse, quien se opuso a que los chicos se dedicaran a la actuación en un principio, se hizo cargo de Dylan y Cole tras las serias adicciones de Melanie y su inestabilidad mental, generadas por su adicción a los estupefacientes que la llevaron muchas veces a maltratar psicológicamente a los gemelos.
A las vidas de los niños llegaría más tarde Chrissy, la nueva pareja de su padre y la encargada de asumir el rol de madre con los chicos, luego de que Wright se desprendiera de su maternidad una vez que los gemelos se fueron de su lado y dejaron de proveerla financieramente.
Durante la conversación Cole puso especial enfoque en su paso por Disney, asegurando que fue un bien tanto para él como para Dylan, pero que ellos fueron diferentes: «Hay, como los ‘niños actores’ que eligen hacerlo, y luego están los niños de la clase trabajadora que, al menos en nuestro caso… quiero decir que comenzó, en realidad, como un medio para poner pan en la mesa», concluyó.