La Organización de las Naciones Unidas valoró que se necesitarán más de 100.000 millones de dólares para reconstruir las zonas de Turquía que resultaron damnificadas a causa de los últimos seísmos.
Esta estimación parte de una evaluación conjunta de la ONU, el Banco Mundial, la Unión Europea y el Gobierno de Turquía, dijo la representante de la primera organización en Turquía, Louisa Vinton.
Según Vinton, los temblores destruyeron, al menos, 214.000 edificios en las diez provincias turcas afectadas, causaron la muerte de 46.000 personas y forzaron a desplazarse a 2,7 millones de habitantes de la zona. La representante lamentó que sólo ha llegado a Turquía el 9,6 % de los 1.000 millones de dólares de ayuda comprometidos inicialmente para el país, lo que dificulta la ejecución de los planes de reconstrucción anunciados por el Gobierno turco.
El próximo 16 de marzo tendrá lugar en Bruselas una conferencia internacional de donantes en la que los países intentarán acumular los 100.000 millones de euros que se consideran necesarios.
Vinton recalcó que las necesidades que deben cubrirse de manera más urgente son la adecuación de las instalaciones de gestión de residuos, los servicios básicos para las personas desplazadas y la reconstrucción del patrimonio cultural destruido.