La violencia machista que sufren las mujeres parece imparable. El 25 de febrero, Rosa Alpina Morales, de 45 años, se convirtió en la víctima de femicidio luego que su pareja, identificado solo como un sujeto hondureño, la mató a balazos.
El asesinato de la mujer de nacionalidad nicaragüense ocurrió en Miami, Florida, Estados Unidos, donde la ciudadana residía desde hace más de una década.
Rosa Alpina Morales es oriunda de Puerto Morazán, Chinandega, y era madre de un menor de cuatro años quien también murió en el ataque, refieren las publicaciones en redes sociales.
El hondureño femicida de Alpina Morales, luego de disparar en varias ocasiones contra la nicaragüense y el niño, usó su misma arma para intentar suicidarse, aunque no lo logró y terminó en estado delicado en un hospital de Miami.
En redes sociales también circuló información en la que señalan que, según familiares de la víctima, el femicida era «extremadamente posesivo» y ejercía violencia contra la nicaragüense, por lo que, saliendo de una fiesta de cumpleaños, a la que asistieron ese 25 de febrero, volvió a violentarla y acabar con su vida.