Estados Unidos expresó este miércoles (22.02.2023) su preocupación por la violencia en Cisjordania, tras la muerte de 11 palestinos en una incursión militar israelí en Naplusa. La Unión Europea, en tanto, se dijo «profundamente alarmada” por lo ocurrido, mientras que el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, remarcó la necesidad de poner fin a los asentamientos israelíes en territorios palestinos ocupados.
«Estados Unidos está extremadamente preocupado por los niveles de violencia en Israel y en Cisjordania», dijo el vocero del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, sobre la muerte o lesiones de «combatientes y transeúntes civiles» en una operación de «contraterrorismo» israelí. Entre los fallecidos hay un adolescente palestino de 16 años, y varias decenas de personas resultaron heridas, entre ellas dos periodistas.
«Reconocemos los verdaderos problemas de seguridad que enfrenta Israel. Y al mismo tiempo estamos profundamente preocupados por el gran número de heridos y la pérdida de vidas civiles», agregó Price. La de la mañana de este miércoles es la operación militar más mortífera de Israel en Cisjordania desde 2005, solo igualada por otra lanzada el 26 de enero que dejó a 10 palestinos muertos.
«Deplora muertes de civiles”
En tanto, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, se mostró «profundamente alarmado por la espiral de violencia en Cisjordania». El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores aseguró que es «de suma importancia que todas las partes trabajen para restablecer la calma y reducir las tensiones para evitar más pérdidas de vidas». Y agregó que la UE «deplora la muerte de civiles”.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, por su parte, exigió el fin de los asentamientos israelíes en los territorios palestinos ocupados, al tiempo que condenó el «terrorismo» en medio de la renovada violencia en Cisjordania. «Cada nuevo asentamiento es otro obstáculo en el camino hacia la paz», dijo ante el Comité de la ONU para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino (CEIRPP en sus siglas en inglés).
«Toda actividad de asentamiento es ilegal según el derecho internacional. Debe cesar», afirmó Guterres.
