Las condiciones de muchas escuelas del país siguen siendo precarias. En una vieja bodega de la Colonia Morales de Chamelecón, funciona la escuela Julieta Kattán, un centro educativo donde muchos niños reciben el pan del saber.
Montañas de escombros y desperdicios custodian el lugar donde 200 niños se preparan para el mañana. Un banner simula la pared que cubre a los infantes de los poderosos rayos del sol.
“Le hacemos un llamado a la Presidenta Xiomara y al Ministro de Educación para que nos ayuden. Nuestros niños no están en condiciones, esta es una galera y hay muchas necesidades. Nuestros niños necesitan un lugar apto para estudiar”, dijo una de las maestras.