El rover Curiosity de la NASA ha registrado más de una década en el cráter Gale de Marte. El rover documentó un paisaje de impresionantes rocas que muestran signos distintivos de agua del pasado de Marte. «Hace miles de millones de años, las olas en la superficie de un lago poco profundo agitaron sedimentos en el fondo del lago, creando con el tiempo texturas onduladas que quedaron en la roca» Así lo informó la NASA en un comunicado.
Uno de los principales objetivos del rover es averiguar si esta área pudo haber sido habitable alguna vez para la vida microbiana. Comprender la historia del agua del cráter es un componente importante de la misión.
El científico encargado del proyecto, Ashwin Vasavada mencionó:»Esta es la mejor evidencia de agua y olas que hemos visto en toda la misión»
Las ondulantes rocas del lago no son las únicas que llamaron la atención de los científicos. Curiosity también vio algunas rocas con capaz regulares sobre ellas. La formación de esas capas de roca aún está bajo investigación, pero podría estar relacionada con antiguas tormentas de polvo. «Las ondas de las olas, los flujos de escombros y las capas rítmicas nos dicen que la historia de húmedo a seco en Marte no fue simple», dijo Vasavada. «El antiguo clima de Marte tenía una complejidad maravillosa, muy parecida a la de la Tierra».
Curiosity se está abriendo camino hacia un pintoresco conjunto de colinas y acantilados. Más adelante en la distancia hay evidencia de lo que pudo haber sido un deslizamiento de tierra húmedo. El paisaje es impresionante.