El Ministerio de Asuntos Exteriores de Canadá informó este viernes su decisión de establecer nuevas sanciones contra Rusia por su operativo militar en Ucrania. A la lista de afectados fueron añadidas 38 personas y 16 entidades que, según Ottawa, están vinculadas a la «desinformación y propaganda» de Moscú.
En el listado figuran varios periodistas, incluyendo entre otros a Serguéi Brilev, presentador de la compañía mediática VGTRK, y Evgueni Poddubny, corresponsal de guerra de ese conglomerado. Asimismo, el Gobierno canadiense sancionó al grupo mediático Rossiya Segodnya, a la agencia RIA Novosti y otros medios rusos.
Bajo las restricciones están ahora también varios artistas y cantantes rusos, como Mijaíl Galustyán, Victoria Daineko, Dmitri Dyuzhev, Nikolái Báskov, Dima Bilán, Nikolái Rastorgúev y Mijaíl Boyarskiy, así como el diputado de la Duma Estatal (Cámara baja del Parlamento ruso) Alexánder Jinstein, entre otros.
El embajador del país euroasiático en Canadá, Oleg Stepánov, señaló que Moscú responderá sobre la base del principio de reciprocidad. «Responderemos por cada acción hostil de las actuales autoridades canadienses», sostuvo el alto diplomático en declaraciones a la agencia TASS.
A su vez, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, trazó paralelismos entre las sanciones canadienses y las prácticas de la Alemania nazi. «Las sanciones canadienses contra periodistas y artistas rusos son comparables con el intento del Tercer Reich de destruir ‘el espíritu no germano’ y de acallar la voz de la razón quemando libros y prohibiendo publicaciones periódicas», escribió la vocera en su cuenta de Telegram. «El nazi Mijailo Jomiak podría haberse sentido orgulloso de su nieta, la viceprimeraministra del Gobierno de [Justin] Trudeau, Chrystia Freeland», aseveró.