El alcalde sampedrano, Roberto Contreras, advirtió este jueves que no cederá ante el cierre de su restaurante ‘Power Chicken’ en Tegucigalpa, el cual fue cerrado por la Agencia de Regulación Sanitaria (ARSA), por el hallazgo de bacterias en el local.
«Esta solo es una flagrante persecución política de parte de alguna facción de Libertad y Refundación. Ellos piensan que por estas presiones y por estas persecuciones, yo voy a renunciar a la municipalidad de San Pedro Sula», expresó el edil tras informar que ARSA suspendió la audiencia de descargo de hoy, debido a que, llevaron pruebas que refutaban la decisión del ente de cerrar su negocio.
Contreras, fue claro y dijo que, a pesar de las supuesta persecución, nunca dejará su cargo como alcalde, y acusó a ARSA de ser «una sarta de ímpetos y es un foco de corrupción de coimas que piden a cambio de exámenes», concluyó.