Un carnicero, trabajador del matadero de Sheng Shui, Hong Kong, ha muerto mientras intentaba sacrificar a un cerdo. La hipótesis que barajan los investigadores es que el animal se habría revuelto contra él, provocando que el hombre fuese herido con el cuchillo que estaba manipulando.
Las autoridades policiales aún se encuentran investigando las circunstancias del suceso. Según han apuntado las primeras pesquisas, el carnicero habría disparado previamente al animal con una pistola eléctrica paralizante.
Posteriormente, el cerdo podría haber recuperado el conocimiento revolviéndose contra el trabajador, golpeándolo y provocando que este se clavase el cuchillo con el que se disponía a sacrificar al animal.
Según confirmaron fuentes policiales de la localidad, el hombre sufrió una herida por arma blanca de 40 centímetros. El hombre fue encontrado malherido por un compañero de trabajo, inconsciente, con el cuchillo en la mano y el pie izquierdo bañado en sangre.
El Departamento de Trabajo de la ciudad china ha trasladado sus condolencias a la familia del fallecido, e investigan el suceso como un fatal «accidente laboral».
Asimismo, también han iniciado una investigación en la cual se tomarán “acciones de conformidad con la ley si hay alguna violación de la legislación de seguridad laboral”.