Por: Marlen Vásquez
La empresaria y modelo estadounidense, Kim Kardashian, compró una de las joyas que lució la princesa Diana, se trata de la “Cruz de Attallah”, un collar compuesto por amatistas y diamantes, el cual adquirió en la subasta “Royal & Noble de Sotheby” que se desarrolla anualmente en Londres.
Kim hizo una oferta de 197.453 dólares, proponiendo un valor doble al estimado, y se quedó con este modelo único en su clase, que se destaca por sus amatistas de corte cuadrado, sus diamantes de corte circular y su peso de 5,25 quilates.
“Raramente llegan al mercado joyas que la difunta princesa Diana poseía o usaba, en especial una pieza como la Cruz Attallah que es tan colorida, audaz y distintiva”, declaró Kristian Spofforth, el director de la joyería de Sotheby’s de Londres.
La joya fue utiliza en varias ocasiones por Lady Diana; entre ellas en una gala benéfica en apoyo a la Organización Birthright que protege los derechos durante el embarazo y el parto, en octubre de 1987, la cual combinó con un vestido de la fallecida diseñadora Catherine Walker.
La joya llegó a manos de la princesa Diana como un préstamo de su amigo, el empresario Naim Attallah, quien la compro en los años 80 en la joyería de la realeza Garrard.
De estilo «fleurée» con detalles de diseño floral, la pieza es un colgante creado en la década de 1920 por Garrard, conformado con amatistas de talla cuadrada con diamantes de talla circular. La cruz tiene un peso total de diamantes de unos 5,25 quilates y mide aproximadamente 136 x 95 mm, precisa Sotheby’s.
«Esta es una pieza de joyería audaz por su tamaño, color y estilo que lanza un mensaje vibrante, ya sea de fe o de moda o, de hecho, de ambas cosas. Estamos encantados de que la pieza reciba una nueva vida en manos de otro nombre mundialmente famoso», expresó Kristian Spofforth, jefe de joyería de Sotheby’s.
