El programa, anunciado por el secretario del DHS, invita a los trabajadores extranjeros indocumentados a denunciar abusos laborales y amenazas migratorias por parte de empleadores. Las víctimas recibirán una acción diferida de deportación y tendrán derecho a una autorización de empleo (permiso de trabajo).
Los principales sindicatos laborales aplaudieron el viernes el anuncio del gobierno de incrementar las investigaciones para proteger los derechos de los trabajadores no ciudadanos (indocumentados) que son víctimas o testigos de violación de los derechos laborales.
La iniciativa, emitida por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), incluye el acceso a las víctimas a un proceso “simplificado y acelerado para solicitar acción diferida” de deportación y una autorización de empleo.
“Los trabajadores dependen unos de otros para tomar medidas para ayudar a hacer cumplir nuestras leyes laborales, por lo que todos estamos en riesgo cuando los empleadores pueden usar amenazas de inmigración para asustar a los trabajadores y hacerlos callar”, dijo, Liz Shuler, presidenta de la American Federation of Labor and Congress of Industrial Organizations (Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales -AFL-CIO-).
La dirigente dijo además que el plan puesto en marcha por el DHS “proporcionará protecciones temporales de estatus y permisos de trabajo a los trabajadores que ejercen sus derechos en el lugar de trabajo y denuncian infracciones. Eso ayuda a mantenernos a todos seguros”.
El anuncio
EL DHS anunció el viernes que los extranjeros (el gobierno de Biden los llama no ciudadanos) que son víctimas o testigos de violación de los derechos laborales “ahora pueden acceder a un proceso simplificado y acelerado para solicitar acción diferida de deportación”.
Este beneficio, una discrecionalidad del ejecutivo autorizada por el Congreso, protege a los trabajadores inmigrantes indocumentados “de las amenazas de represalias relacionadas con la inmigración por parte de los empleadores explotadores”, agregó el ministerio.
El anuncio señala que, con efecto inmediato, “este proceso mejorará la práctica de DHS establecida desde hace mucho tiempo de usar su autoridad discrecional para considerar las solicitudes de acción diferida relacionadas con el empleo y las agencias de empleo caso por caso”.
La acción diferida de deportación se utiliza en programas para beneficiar a extranjeros indocumentados que no representan una amenaza a la seguridad pública y nacional de Estados Unidos, y el gobierno considera que sus deportaciones causarían graves daños a ellos y sus familias.
Un grupo importante de indocumentados beneficiado con acción diferida en 2021, durante el gobierno de Barack Obama, son los dreamers, jóvenes indocumentados que ingresaron a Estados Unidos antes de cumplir los 16 años y se hallaban en el país desde el 15 de junio de 2007.
En la actualidad se encuentran protegidos de deportación poco más de 600,000 dreamers.
Cómo se pide el amparo
El DHS explica que los trabajadores víctimas de abusos y amenazas por parte de sus empleadores podrán visitar la página digital del DHS.gov para obtener información adicional en inglés y español respecto al programa, y presentar solicitudes de amparo de deportación.
“Estas mejoras promueven el compromiso del gobierno de empoderar a los trabajadores y mejorar las condiciones del lugar de trabajo, al permitir que todos los trabajadores, incluidos los no ciudadanos, hagan valer sus derechos legales”, dijo Alejandro Mayorkas, secretario del DHS.
El funcionario agregó que “los empleadores sin escrúpulos que se aprovechan de la vulnerabilidad de los trabajadores no ciudadanos hacen daño y perjudican a las empresas que cumplen con las reglas”.
El gobierno, asegura el plan, hará responsable de estos abusos a quienes violen la ley y protegerá los derechos de los trabajadores migrantes, al tiempo que pide que denuncien “las violaciones que han sufrido u observado y cooperar en las investigaciones de normas laborales”.