Los primeros «Marder» serán suministrados el primer trimestre de 2023, después de que el Ejército alemán haya formado en su manejo a soldados ucranianos, agregó dicho medio, citando fuentes gubernamentales. Además, el Gobierno de Olaf Scholz se plantea también enviar al Ejército ucraniano más blindados antiaéreos de tipo Gepard, según fuentes de «Der Spiegel».
Berlín y Washington emitieron un comunicado conjunto para anunciar la decisión de suministrar por primera vez a Kiev vehículos de combate, aunque no proporcionaron cifras.
El Marder 1A3 es un vehículo de combate de infantería (VCI) diseñado en los sesenta y producido a fines de los setenta, para el Ejército Alemán de la Alemania Federal.
Desprotección de los cielos de Ucrania
Después de que Rusia enfrentara crecientes reveses sobre el terreno, comenzó a atacar por aire y sistemáticamente infraestructuras críticas en Ucrania en ataques que han interrumpido el suministro de electricidad, agua y calefacción a millones de personas.
Fabricado por Raytheon, el MIM-104 Patriot es un sistema de misiles tierra-aire (SAM) desarrollado inicialmente para interceptar aviones de alto vuelo. Fue modificado en la década de 1980 para centrarse en la nueva amenaza de los misiles balísticos tácticos, y demostró su eficacia contra los Scuds iraquíes de fabricación rusa en la primera Guerra del Golfo, la primera vez que se utilizó el sistema en combate.
«A diferencia de los otros sistemas occidentales que se han proporcionado a Ucrania, (Patriot) tiene algunas capacidades de misiles antibalísticos (dependiendo del tipo de misil que se utilice)», dijo a la AFP Karl Mueller, politólogo de la Corporación RAND. «Si Rusia adquiriera un número considerable de misiles balísticos de Irán, la mayoría de los demás sistemas de defensa antiaérea ucranianos no proporcionarían ninguna protección contra ellos», añadió.
Defensa de misiles iraníes
Patriot ha demostrado su eficacia en Arabia Saudí contra misiles balísticos de diseño iraní disparados desde Yemen, y el contratista principal Raytheon dice que el sistema ha interceptado más de 150 misiles balísticos en combate desde 2015.
Cuando Rusia invadió el país en febrero, las defensas aéreas de Ucrania consistían en gran medida en aviones de la era soviética y sistemas SAM, que Kiev utilizó eficazmente para resistir a la superioridad aérea de Moscú.
NASAMS, de Estados Unidos y IRIS-T, de Alemania
Ucrania ha logrado desde entonces reforzar la defensa de sus cielos. Estados Unidos proporcionó NASAMS y Alemania IRIS-T, dos sistemas avanzados, mientras que también se han donado equipos más antiguos, como los sistemas S-300 y HAWK y los misiles Stinger.
Kiev ha utilizado varios sistemas para combatir los misiles de crucero y los drones Shahed-136 de Moscú, pero los lanzadores de sistemas SAM y los misiles modernos -incluido el NASAMS- escasean.
El objetivo de los ayudantes internacionales de Ucrania es construir defensas aéreas multicapa para el país, consistentes en sistemas de baja, media y gran altitud que puedan proteger contra diversas amenazas.