Shakira deja atrás el 2022, que fue uno de sus años más complicados, debido a sus problemas con el fisco español la delicada salud de su padre y su separación amorosa con el padre de sus hijos, Gerard Piqué. Y alista sus maletas para mudarse a Miami, lugar en donde seguirá incrementando el éxito y fortuna que le trajeron sus sencillos, «Monotonía» y «Te felicito».
Sin embargo antes de mudarse a Estados Unidos junto a sus hijos, Sasha y Milán, la colombiana quiere dejar «todo atado» en España para empezar su nueva vida en América del Norte con el pie derecho, por lo que además de arreglar el problema con el fisco español, también tiene que solucionar un problema con un exfamiliar.
Está nota que no tiene nada que ver con Gerard Piqué. «Es de un exmiembro de la familia, su excuñado Roberto García, que tuvo una relación de su hermana Lucila. Según cuenta Roberto, Lucila le dejó abandonado, se marchó a Barranquilla y desapareció una gran cantidad de dinero que él invirtió en unas cosas que la familia de Shakira le dijo que invirtiese, y él se sintió engañado».
Ante esta supuesta traición por parte de su hermana y para evitar más chismes en esta etapa de su vida : «Shakira ha tomado la decisión de llegar a un acuerdo millonario con Roberto… Fue un encuentro que se cerró hace unos días en las Islas Canarias. Ella no apareció físicamente».
Roberto García ya no podrá hablar de Shakira
«A cambio de que Roberto no hable públicamente nunca más de la familia», sostuvo un periodista que cubrió la nota. «Él ha tenido que entregar una documentación comprometida de la familia que podría dar mucho de que hablar y que demostraría todo lo que ha contado este tiempo atrás».
Y es que la expareja de la hermana de Shakira ha dicho que la colombiana habría estafado a varias ONG por intereses propios. Sin embargo, después de este acuerdo millonario, Roberto García ya no podrá hablar más de su ex familia.
