El máximo goleador histórico de las finales de los Mundiales, el segundo máximo goleador histórico francés en la Copa del Mundo, Kylian Mbappé, atisba un nuevo récord que añadir a una carrera que va camino de pulverizar todos los registros. El delantero del PSG, que no quiso tomarse vacaciones tras la final del Mundial para pasar página, quiere convertirse en el máximo goleador de la historia del conjunto parisino.
Actualmente, el talento de Bondy suma 190 goles en 237 partidos, es decir, un ratio de 0,80 goles por encuentro. Cavani, que ostenta el récord con 200 dianas, necesitó 301 partidos para lograrlo, en un porcentaje claramente inferior de 0,66. El uruguayo superó a Ibrahimovic, que a su vez fue superado por Mbappé la temporada pasada, ostentando el sueco el mejor porcentaje de los tres, habiendo marcado 156 tantos en 187 partidos, con un ratio de 0,87.
A mediados de febrero, justo antes de la eliminatoria contra el Bayern de Múnich, la marca de Cavani podría haber sido ya batida. El PSG no tiene un calendario muy exigente y Mbappé, que ha marcado 29 goles y ha otorgado 7 asistencias en 32 partidos esta temporada, incluidos los tres que marcó en la final del Mundial, no dispone de freno de mano. El miércoles, contra el Estrasburgo, el exjugador del Mónaco tiene la primera prueba en su camino hacia el récord del uruguayo.
“Me queda solo Cavani para ser el máximo goleador de la historia del PSG. Veremos qué pasa. Ser el máximo goleador del PSG es algo que no se puede ignorar. Veremos qué pasa”, dijo el 26 de febrero de 2022, justo cuando superó a Ibrahimovic en la segunda posición de goleadores históricos del PSG, al ser preguntado sobre su continuidad en París para igualar a Cavani. Tres meses después, el conjunto parisino consumaba su renovación hasta 2024 (dos años y uno que solo él puede ejecutar unilateralmente), otorgándole vía libre para seguir escribiendo la historia del club.