China abandonará su política de confinamientos para combatir el covid-19 y reabrirá las fronteras a partir del 8 de enero de 2023, informa SCMP citando fuentes anónimas. Desde 2020, el covid-19 se considera una enfermedad infecciosa de categoría A (el nivel de la peste bubónica), lo que obliga a las autoridades chinas a imponer las restricciones más duras, como el cierre de ciudades para contener la propagación de la enfermedad.
Sin embargo, según SCMP, citando a autoridades sanitarias y responsables de hospitales chinos, el coronavirus se rebajará a la categoría B, que solo necesita «el tratamiento y las medidas necesarias para frenar su contagio». Además, la cuarentena para los viajeros que lleguen al país dejará de ser obligatoria y por eso se eliminará. Por otra parte, la Comisión Nacional de Salud de China dejó de publicar informes diarios sobre los nuevos casos del coronavirus desde 25 de diciembre.