La situación de los derechos humanos de las personas LGBTI es una gran preocupación en Honduras por las continuas y graves violaciones de derechos humanos que sufren a diario. En efecto, de acuerdo al Centro de Monitoreo de Medios de Comunicación de la Red Lésbica Catrachas, durante 2019, se han reportado 21 muertes violentas de personas LGBTI y lo que va del año 2022 han asesinado a 39 miembros de dicha comunidad y dos personas aún siguen desaparecidas.
Los casos de odio en Honduras contra las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales están en un 91 % de impunidad y el 9 % está en proceso de judicialización.
Honduras ha recibido recomendaciones por parte de mecanismos de derechos humanos, vinculadas a implementar políticas y programas que promuevan la tolerancia y la no discriminación de las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales, así como garantizar el cumplimiento de la normativa vigente para sancionar los delitos y la violencia motivada por prejuicios.
De manera sistemática, los órganos creados en virtud de los tratados de derechos humanos de las Naciones Unidas han afirmado que la orientación sexual y la identidad de género, incluida la expresión de género, son motivos prohibidos de discriminación, como lo son la raza, el sexo, el color o la religión. Estos órganos también han expresado su preocupación con respecto a las violaciones de los derechos humanos por motivos de identidad de género, incluida la expresión de género, y han exhortado al gobierno de Honduras a hacer frente a estos flagelos.