De acuerdo con los datos recabados por la Plataforma Regional de Coordinación Interagencial (R4V), actualizados al 5 de noviembre de 2022, se estima que el éxodo forzado de venezolanos supera ya los 7,1 millones de personas, de los cuales el 84.9 por ciento (5,96 millones) se han establecido o están en tránsito en diecisiete países de América Latina y el Caribe, de manera preponderante en Colombia, Ecuador, Perú, Chile y Brasil.
El volumen masivo de migrantes y refugiados venezolanos -sobre todo a partir del 2015-, las precarias condiciones materiales bajo las cuales muchos de los migrantes se vieron obligados a abandonar Venezuela, lo inusitado del fenómeno, y la difícil situación económica por las cuales ha atravesado América Latina en los últimos años, han convertido la recepción y atención de este éxodo sin precedentes en un inmenso desafío para toda la región. Esto es especialmente el caso para las sociedades de acogida, las agencias intergubernamentales y las organizaciones civiles vinculadas con el fenómeno migratorio internacional.
Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V)
Con la aprobación en 1951 de la «Convención de las Naciones Unidas sobre el Estatuto de los Refugiados”, quedó establecido formalmente en el mundo la protección internacional de los refugiados. En 2016, la Asamblea General de las Naciones Unidas, adoptó la Declaración de Nueva York para los Refugiados y los Migrantes, allí se estableció el compromiso de los Estados Miembros de fortalecer y mejorar los mecanismos de protección a los migrantes y se reconoció, de manera expresa, que la protección a las personas refugiadas y la ayuda a los Estados de acogida son responsabilidad compartida, y debe ser asumida de forma más equitativa y predecible.