Medios internacionales han informado que, el presidente del Museo Británico, George Osborne, mantuvo una conversación «secreta» con el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, en la que abordaron la devolución de los mármoles del Partenón de Atenas, también conocidos como mármoles de Elgin a Grecia.
El designado responsable del museo londinense se habría reunido con el líder griego en un hotel del acomodado distrito de Knightsbridge de la capital británica.
Asimismo, Mitsotakis, que durante su visita al Reino Unido fue recibido por el primer ministro británico, Rishi Sunak, y el rey Carlos III, habría mantenido «conversaciones exploratorias» con Osborne el pasado noviembre, con respecto a estos artefactos.
La nueva reunión en Knightsbridge, cuyo único objetivo era abordar la devolución de las esculturas de 2.500 años de antigüedad, ha impulsado las expectativas de que se avance hacia la resolución de la importante disputa que enfrenta al Reino Unido y Grecia.
Es importante decir que, Atenas reclama las piezas desde hace años y construyó en 2009 un nuevo Museo de la Acrópolis para demostrar que cuenta con un lugar adecuado para albergar ese tesoro arqueológico.
Las esculturas, conocidos como los Mármoles de Elgin, ocupan un lugar importante del Museo Británico, que cuenta con una amplia colección de piezas de la antigua Grecia y otras culturas de la antigüedad, además de poseer la mayor muestra de objetos del Egipto faraónico fuera de El Cairo.
Los mármoles del Partenón fueron adquiridos por el aristócrata escocés Thomas Bruce, séptimo conde de Elgin, entre 1801 y 1805, cuando era embajador ante la corte Otomana en Estambul (ocupada por Grecia) y vendidos después al Reino Unido, transacciones que Grecia ha calificado como saqueo.
