Cada vez que Ricky Martin se presenta en Argentina el público estalla de alegría. Sin embargo, esta noche hubo algo diferente en su concierto en el estadioMovistar Arena, en donde reunió en la segunda de las tres fechas que tiene previstas en nuestro país a más de 11.000 personas.
En esta oportunidad, tras dos años de ausencia, el boricua regresó para presentar un espectáculo que ideó hace un tiempo y probó en Los Ángeles y tras salir de gira eligió Argentina para presentarse de manera “Sinfónica” repasando sus 38 años de carrera.
Así fue como apenas salieron las entradas a la venta, se agotaron enseguida las tres fechas de su gira “Ricky Martin sinfónico” en Buenos Aires: más de 50.000 personas estuvieron conectadas en las filas virtuales esperando conseguir su lugar y en menos de una hora arrasaron con todas las localidades. En principio, el cantante había puesto a la venta entradas solo para una función, pero ante la creciente demanda tuvo que agregar dos más.
En una noche llena de pasión, nostalgia y puro corazón, Ricky Martin reunió a más de 60 músicos en el escenario, donde no solo rindió homenaje a su música, sino que además brindó un espectáculo sorpresivo y conmovedor para todo el público presente. Apenas sonaron los acordes de La copa de la vida, la canción que representó al Mundial de Francia en 1998, aparecieron en pantalla gigante las imágenes del primer gol del partido de Argentina contra Polonia, disputado esta tarde en Qatar. Con los jugadores abrazados tras convertir el tanto que llevaba a Argentina a la clasificación para octavos de final por la Copa del Mundo, Ricky arrancó a cantar y a moverse al ritmo de su canción a modo de homenaje al país que tantas alegrías le ha brindado desde que era apenas un adolescente.
La gente estalló de emoción y no paró de cantar y bailar al compás de la música. El cantante, con un gorro y una bandera celeste y blanca felicitó a todos por el esperado triunfo en el Mundial.
