El líder norcoreano, Kim Jong-un, volvió a aparecer de forma pública junto a su hija en una sesión de fotos publicadas por los medios estatales, y en las que posan altos cargos del régimen involucrados en el último lanzamiento de un misil intercontinental.
Las fotos publicadas por la agencia estatal KCNA, muestran a Kim en varias poses del lado de una niña, quien se cree que es su hija mediana y llamada Kim Ju-ae, vestida con un abrigo negro y cuya apariencia física recuerda a la de la primera dama, Ri Sol-ju.
La KCNA menciona que en las fotos aparece el líder supremo «con su querida hija» y con militares y científicos «que contribuyeron al lanzamiento de prueba exitoso del Hwasong-17», una prueba llevada a cabo el pasado día 18 y que supone otro importante avance para el programa armamentístico del régimen.
Los medios norcoreanos mostraron a la niña por primera vez el pasado día 19 en imágenes de esa mencionada prueba de un misil balístico intercontinental (ICBM) explicando solamente que Kim supervisó el lanzamiento «junto con su querida hija y esposa», sin ofrecer más datos.
En aquella primera aparición pública de la niña se la podía ver enfundada en un abrigo blanco escuchando a su padre mientras daba instrucciones a funcionarios, contemplando junto a Kim el misil en su fase de despegue o caminando de la mano con él junto a la lanzadera del proyectil.
Los medios norcoreanos rara vez difunden información sobre los familiares cercanos de la dinastía Kim, que gobierna el país con mano de hierro desde los años cuarenta, y la niña no había sido hasta ahora una excepción, puesto que la propaganda nunca había siquiera reconocido su existencia.