La guerra de Ucrania, que comenzó hace nueve meses con la invasión de las tropas rusas, está dejando numerosas historias humanas que reflejan el rostro siempre amargo de los conflictos bélicos.
Una de estas historias es la de una pareja de refugiados ucranianos que se han casado en Reino Unido, pero obviamente sin poder estar rodeados de sus familiares ni sus seres queridos.
Pero para no sentirse solos, recurrieron a una ingeniosa solución: colocaron las fotos de estos seres queridos en las sillas de los invitados al enlace, que se celebró en una mansión en Buckinghamshire.
María Bilyk, de 23 años, y Vitalij Melynik, de 27, iban a casarse este verano en la ciudad de Leópolis (Lviv), pero la guerra desbarató sus planes. Vitalij lleva años afincado en Reino Unido desde hace casi una década, mientras que María tuvo que huir por el conflicto.
María dejó Lviv para evitar los bombardeos y, después de una ardua espera, cruzó la frontera polaca hacia Varsovia. Tres semanas después, obtuvo una visa para ingresar al Reino Unido. La feliz pareja ahora está establecida en Feltham, al oeste de Londres, y ya son marido y mujer.
«Ahora, lo único que realmente queremos es que termine la guerra», dijo María. «Y que celebremos una gran boda donde podamos invitar a tantas personas como sea posible”.