Intensos operativos tras la búsqueda de extorsionadores se desarrollan en el punto de taxis de la colonia Buenos Aires de Tegucigalpa.
Los agentes militares interrogan a los dueños de pulperías, conductores de buses rapiditos y taxis, con el fin de erradicar el cobro de extorsión y dar con el paradero de grupos antisociales que atemorizan a los habitantes de esta colonia.
Esta operación se da tras la declaratoria de la presidenta Xiomara Castro de hacerle frente al cobro de extorsión.