La ola de crimen no para en el territorio hondureño, esta conlleva que cada día se registren asesinatos, extorsión y secuestros; inclusive los policías que se dedican a servir y proteger, son víctimas de este flagelo imparable en la nación.
Según el Sistema Estadístico Policial en línea (Sepol), se han registrado desde el 2013 hasta octubre de 2022 la muerte violenta de 35 agentes por año en promedio, a causa de la violencia en Honduras. La violencia que ha imperado en el país ha cobrado la vida de unos 430 agentes de la Policía Nacional, en la última década.
En lo que va del año 2022, nueve policías han muerto y 42 policías han resultados lesionados. El año más sangriento contra los policías fue el 2014 cuando 72 agentes policiales perdieron su vida de forma violenta.
Las autoridades policiales señalan que algunos agentes han sido ejecutados cumpliendo con su deber en distintos operativos, o cuando están de día libre. También reconocen que algunos policías son victimas del crimen organizado y narcotráfico por estar confabulados con los grupos antisociales.
El Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), destaca que una de las ocupaciones de mayor riesgo es la de ser policía.