La tormenta tropical Nicole avanza hacia la costa este de Florida, donde el nuevo cohete de la NASA para ir a la Luna permanecía en su plataforma de lanzamiento para un intento de despegue programado la próxima semana, pero que podría verse afectado.
Se espera que la tormenta, actualmente ubicada sobre el océano Atlántico, se convierta en huracán el miércoles cerca de las Bahamas, y que luego toque tierra en Florida el mismo día por la noche o el jueves por la mañana, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) con sede en Miami.
Ya se emitió una alerta de huracán en la costa, donde se encuentra el Centro Espacial Kennedy, desde donde despegará el cohete.
El pasado lunes, la NASA anunció que había decidido, en base a los pronósticos entonces disponibles, dejar el cohete en su plataforma de lanzamiento, donde fue colocado hace solo unos días.
El cohete SLS de 98 metros de altura tuvo que ser devuelto a finales de septiembre a su edificio de ensamblaje, a pocos kilómetros de distancia, para protegerlo del huracán Ian. Entonces, el ingeniero jefe del cohete, John Blevins, explicó que para mantener al cohete en su plataforma de lanzamiento los vientos máximos debían ser inferiores a 137 km/h.
La NASA manifestó «evaluar el estado del intento de despegue» previsto para el 14 de noviembre en función de la evolución de las condiciones meteorológicas. Anteriormente se habían anunciado dos fechas alternativas para el despegue, el 16 y el 19 de noviembre.
El costo del cohete, que nunca ha despegado y cuyo lanzamiento fue cancelado a último momento dos veces en los últimos meses por problemas técnicos, se estima en varios miles de millones de dólares.
La misión de prueba Artemis 1, sin tripulación a bordo, marcará el primer vuelo del principal programa estadounidense de regreso a la Luna.
En sus próximas etapas, el programa Artemis aspira a llevar a la Luna a la primera mujer y a la primera persona negra, no antes de 2025.