Pese a que Honduras tiene un clima relativamente estable y queda sin ningún tipo de alerta, Copeco llama a la población que estén al pendiente y haga monitoreo constante de su comunidad y viviendas por posibles deslizamientos a causada de las fuertes lluvias que azotaron el país por los fenómeno climáticos recién pasados.
Asimismo, Copeco indicó que el Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) está siempre monitoreando posibles nuevos fenómenos lluviosos del período ciclónico del Atlántico que culmina el próximo 30 de noviembre.
De igual manera, la entidad está brindando la atención debida a las familias afectadas por las lluvias provocadas por la Tormenta Julia y que aún permanecen en los albergues.
“Julia” inició su recorrido en territorio colombiano, pasó a 17 kilómetros del archipiélago de San Andrés y Providencia e ingresó a Centroamérica por territorio nicaragüense, con vientos máximos de 140 km/h, donde se debilitó y se convirtió en tormenta tropical.
En nuestro país autoridades confirmaron al menos la muerte de cinco personas, entre ellas una mujer que fue arrastrada por las aguas de una inundación y la de un niño de cuatro años, que naufragó con su familia en una embarcación cerca de la frontera con Nicaragua.