El Gobierno de México ha presentado un documento en el que sugiere la “no obligatoriedad” del uso del cubrebocas en espacios cerrados en México. En la nota solo aparece el uso de dos modos: como “recomendable” o “no obligatorio”.
A pesar de ello, el organismo mantiene la recomendación de la mascarilla tanto en espacios abiertos como cerrados cuando no se pueda mantener una “distancia sana”, es decir, de al menos 1,5 metros.
El documento compartido por las autoridades sanitarias indica que se puede omitir el uso del cubrebocas cuando las personas no comparten el “lugar físico de trabajo”, cuando se consumen “bebidas o alimentos” o cuando el trabajo es “físico intenso”.
Por otra parte, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) mantiene el uso obligatorio de cubrebocas N95 o equivalentes en espacios de trabajo donde exista una “muy alta” exposición a fuentes conocidas o sospechosas de covid-19, como hospitales o centros de salud.
En documento Lineamientos para la continuidad saludable de las actividades económicas ante covid-19, el organismo gubernamental ha expuesto la supresión de los tapetes desinfectantes porque, según indica, “no existe evidencia de que funcionen”.
Desde el inicio de la pandemia, el territorio nacional no ha contado con una obligatoriedad estricta del uso del cubrebocas. La normativa ha variado según el territorio: en Ciudad de México se impuso la necesidad del uso de la mascarilla en el transporte público; mientras que en otros estados como Michoacán se implementaron multas a las personas que se negaban a utilizarla.
Desde el inicio de la pandemia de la covid-19, México ha confirmado casi cinco millones de casos de covid-19 y 305.893 fallecidos en total, según indica el último comunicado oficial. La tasa de incidencia acumulada es de 3.789 por cada 100.000 habitantes.