Luego de que el Juzgado Penal en Materia de Corrupción le dictara medidas sustitutivas a prisión, el exministro de la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO), Gabriel Rubí, aseguró que es inocente, tras ser acusado de los delitos de violación a los deberes y fraude, por la compra de salas de aislamiento para Covid-19.
Según acusación de la Fiscalía, Rubí, se coludió junto con otros exfuncionarios estatales para adquirir por más de 5.5 millones de lempiras el hospital móvil de Villanueva, Cortés, que al final no cumplió con los parámetros para atender afectados por el covid-19.
“Este hospital, se llevó a Villanueva, para descongestionar San Pedro Sula, se puso donde se pudo; se situó en un predio de un pastor y solamente se inundó una vez”, relató Rubí a periodistas.
El extitular de Copeco, declaró que la carpa móvil se atendía alrededor de 40 personas por día, y un total de 10 mil personas al año con síntomas de COVID-19.
“Para que haya corrupción, es porque alguien omitió algo para favorecer a otro de manera dolosa y en este caso se comprobó que no, porque se compró directamente al fabricante”, aseveró.
Rubí comparecerá en audiencia inicial el próximo miércoles 14 de septiembre a las 9:30 de la mañana.