En ocasiones surgen accidentes que pueden terminar en anécdotas difíciles de creer. Una mujer tailandesa de 54 años se quedó encerrada en el baño por un percance y, al vivir sola, tuvo que permanecer allí durante varios días.
La mujer entró al baño de su casa el pasado 22 de agosto como cualquier otro día, pero lo que vivió le cambió la semana. Quedó atrapada al cerrar la puerta y fallar el cerrojo. Además, no llevaba encima el teléfono móvil por lo que tuvo que golpear la puerta y pedir ayuda gritando, aunque no tuvo éxito.
Estuvo encerrada durante tres días y en ellos sobrevivió por el agua del grifo. Con el paso de las horas, la mujer fue desesperándose más e incluso llegó a escribir un mensaje de despedida en la pared con productos para la piel, pensando que iba a fallecer allí.