Un repartidor tardó casi 6 horas en subir a la cima del monte Fuji, en Japón, para entregar una pizza a un cliente.
El precio de la pizza era de 3.776 yenes (unos 27,5 dólares), mientras que la entrega ascendió a 40.000 yenes (unos 291 dólares). El insólito servicio tuvo lugar el 20 de agosto, pero esta semana se hizo viral en las redes sociales.
PEDIDOS INSÓLITOS
Dos años atrás una empresa que entregaba pedidos a domicilio en Argentina detalló las cosas más insólitas que debieron enfrentar a la hora de llevar un pedido a domicilio.
Hubo pedidos inesperados como comprar un pasaje en micro, despertar a un jefe, y hasta comprar objetos sexuales para una despedida de soltera.